“A Jardín no se va, se vuelve”

Hacia el sur de la ciudad de Medellín, se encuentran varios atractivos turísticos; los cuales hay que visitar si la idea es disfrutar de un verdadero recorrido ecológico. La ruta que hoy se sugiere, es hacia el suroeste Antioqueño. Ruta que nos lleva al municipio de Jardín. Este municipio está ubicado a dos horas y media de la ciudad y es un atractivo para la gente que  goza del campo, la agricultura y por supuesto de construcciones muy coloniales, ya que el pueblo aún conserva sus casas antiguas y una serie de lugares para conocer y disfrutar.

 El municipio tiene el nombre realmente de “El jardín”, pero por costumbre solo se le conoce como Jardín; fundado en 1860 por Indalecio Peláez, este señor compró 500 hectáreas  y llevó a su familia para prosperar en este lugar. El terreno que adquirió se caracterizaba por su vegetación, ya que tenía guayacanes, siete cueros y  yarumos blancos; al ver todos estos árboles florecidos, el señor Indalecio decide llamar a su hacienda “El jardín”. Ya más tarde con la ayuda de un sacerdote llamado José María Gómez Ángel, son quienes inician la fundación del pueblo que ahora se conoce como, “El Jardín”.

“El municipio cuenta con 14.323 habitantes, resultado que arrojó el censo hace cinco años”, dice el señor Luis Alberto Agudelo; coordinador de  turismo en el municipio. ”Jardín lleva treinta años viviendo de un turismo ecológico”, dice el coordinador de turismo; “pero también tiene la vocación de ser un municipio agrícola, básicamente café y plátano”. Desde hace algunos años se viene trabajando con la alcaldía municipal, para hacer del pueblo un atractivo en el agroturismo y en el ecoturismo, menciona Luis. 

Dentro de los lugares recomendados  para visitar y disfrutar del paisaje se encuentran: La cueva del esplendor, La tribuna o Salto del ángel, nombre que está proyectado cambiarse, “ya que no queremos tener una similitud con el que hay en Venezuela; porque las proporciones no son las mismas y el nombre nada tiene que ver”; menciona Luis Alberto. También se puede disfrutar de la flora y de la fauna como  el loro oreji-amarillo, una especie endémica de la región y en vía de extinción;  se encuentra el gallito de las rocas, especie en vía de extinción y además emblema de Perú, se encuentra en la cordillera de los andes, por esta razón lo encontramos en Jardín, también se encuentra el oso de anteojos conocido como el  oso andino, el oso hormiguero, la nutria, el venado y el tigrillo, y “con la ayuda de  los programas  de protección que tiene el municipio se están repoblando”; menciona el coordinador de turismo.

Otro de los atractivos, es disfrutar de los dos ríos con los que cuenta jardín; “agua cristalina y fría pero natural, ya que no se junta con otras quebradas de municipios aledaños. Las aguas de jardín, nacen en jardín”. También se puede disfrutar de las minas abandonadas, del Valle de las Marías por la vereda la Herrera, este recorrido se realiza a caballo.

La cabalgata turística es uno de los atractivos más fuertes en esta zona, porque  es el placer de disfrutar del paisaje y por medio de los senderos por los que se transita, se puede disfrutar de la vegetación, de los cultivos y  de una vista panorámica del pueblo; en el que lo más monumental que se puede observar, es la iglesia; que fue construida de piedra y tiene una altura bastante significativa. Es importante porque  la iglesia es la única construcción de ese tamaño en el pueblo.

En la cabalgata, también se puede disfrutar de la visita a diferentes trucheras, ya que jardín cuenta con  siete; en las cuales lo ideal aparte de conocer es disfrutar de un buen almuerzo. Las trucheras distribuyen su producto a diferentes zonas del departamento antioqueño y abastecen  a una parte de la población jardileña, ya que genera empleo para varias familias. Lo más típico que podemos encontrar en estas trucheras, es el plato recomendado; que consta de arroz, patacón, ensalada y una trucha bañada en dulce de panela, ya que en este municipio  se cultiva caña de azúcar y hay una molienda, que abastece el municipio de panela.

Normalmente las personas que visitan este municipio; llegan  de todo el país, especialmente la gente de Bogotá y Medellín. Tienen  “un promedio de 15 turistas extranjeros por semana, sobre todo europeos;  que llegan con el fin de estudiar las aves”; dice Luis Alberto Aguádelo. Todos los fines de semana con los que cuenta el año, son visitados, pero sigue siendo a fin de año la temporada más alta, ya  que coincide con la fiesta de la rosa, que se celebra en el segundo puente de enero, es esta la época en la cual el municipio tiene copado a todos los hoteles.

Se puede encontrar hoteles muy económicos y que se ajustan al presupuesto de cada uno y a las necesidades que también se  demanden. Se puede encontrar desde 15.000 mil pesos hasta 80.000 por persona. La oficina de turismo trata de regular estos hoteles por medio de categorías, así como se maneja en la ciudad.

Como proyectos que están prósperos a desarrollar con el fondo de promoción turística, son diseñar y señalizar dos senderos eco-turísticos;  uno es el salto del ángel y el otro es  hacia la cueva del esplendor, en el cual se puede disfrutar de la tranquilidad y de la frescura de la naturaleza, de un aire puro y de la vista del pueblo. Al final del recorrido se pueden observar los farallones del  citara de la cordillera occidental y luego se encamina hacia la quebrada la linda, donde se encuentra una caverna, en este lugar  el agua cae por un anillo de roca. La idea es realizar esta caminata bajo la asesoría de un guía, que pueda hablar de la historia y de la vegetación que se encuentra en esta zona. Al final del recorrido lo que se puede decir es “A JARDIN NO SE VA, SE VUELVE”.